Irene Esteve // ACPP Navarra/Nafarroa
A menudo la imagen recurrente del trabajo en una ONGD traspasa las fronteras nacionales; una se imagina trabajando con una comunidad de Níger en un proyecto de cría y engorde de ganado con enfoque de género o en un proyec-to de empoderamiento de la mujer palestina y libanesa. Una se imagina lejos, en otra cultura, en una sociedad que tiene una manera distinta de entender qué es desarrollo. Y está en lo cier-to. Pero a menudo olvidamos la otra labor de una ONGD, la que trata de concienciar y sensibi-lizar a la sociedad en la que está, de formar una ciudadanía global, de valores universales y co-nocimiento del otro. Es en este marco en el que se inserta la Educación Transformadora para la Ciudadanía Global, la Educación para el Desa-rrollo.
Desde la delegación de ACPP en Navarra esta-mos trabajando en un proyecto de educación formal en el que, a través de diferentes herra-mientas, pretendemos impulsar de manera tras-versal conceptos como igualdad de género, construcción de paz, inmigración, refugio y asilo en los currículos escolares para que los alumnos y alumnas tengan una comprensión y unas he-rramientas con las que sean capaces de cons-truir una sociedad más justa, más humana, más global.
Por eso, este curso escolar hemos trabajado con el alumnado de ESO del IES Iturrama temas rela-cionados con el género y las migraciones causa-das por ausencia de paz a través de unas sesio-nes de Teatro Fórum realizadas por el grupo de teatro TEAVIDE. En ellas, el alumnado no era un sujeto pasivo que meramente observaba el tras-curso de los acontecimientos sino un actor de cambio, una voz que podía alzarse ante las in-justicias que, de manera intencionada, presen-taba la escena, en la que una refugiada pedía asilo en un juzgado de un país occidental por causas de carencia de agua en su país y todo lo que esto conllevaba.
Otra de las herramientas utilizadas en el proyecto han sido las formaciones al profesorado del CPEIP Rochapea, impartidas por las expertas en Género y Coeducación Ane Iturmendi y Renata del Coso. Desde la visión de uno mismo y el re-conocimiento del otro, en estas formaciones se ha trabajado el concepto de género a través de la reflexión de las vivencias personales.
Como parte del todo, se torna indispensable
dotar a los docentes de herramientas que les permitan educar en la universalidad y en la dife-rencia, en el respeto al otro ya que, al fin y al cabo, ellos son una pieza fundamental para con-seguir el objetivo: educar personas globales pre-paradas para convivir y entender la dignidad de toda persona.